Dirección

Calle de las Huertas, 18, Madrid, España

Teléfono

914 299 356

Localización
Descripción

Está situada en el Barrio de la Letras y se fundó en el año 1827, es sin duda una de las tabernas más antiguas de Madrid.

Sus primeros propietarios fueron Dámaso Pesquera y Victoriano Sanz, empezó como taberna donde se vendía vino y los parroquianos lo acompañaban con un trocito de bacalao salado. A estas personas, les sucedió la familia De Dios, que procedían de Segovia.

 

Era un lugar de encuentro para los visitantes del Museo del Prado y también para literatos, músicos y gente del mundo del toro. Su actual propietario es Alfonso Delgado, un gestor que lleva años al frente del negocio y que ha sabido mantener el espíritu castizo y auténtico del mismo.

 

Es una típica taberna madrileña, donde se han mantenido todo su elemento identificativos, como las puertas de gruesos cuarterones de madera pintadas en rojo, muy usual en este tipo de tabernas. Su característica fachada con el rótulo de Casa Alberto en su parte superior le confiere un aspecto inconfundible. Ya en el interior de la taberna, descuelgan las columnas de hierro forjado con sus bellos capiteles y unas originales lámparas de bronce colgadas del techo. Sobresalen unos zócalos de madera labrada, de gran belleza; tienen en su parte superior dos estantes superpuestos donde se colocaban los vasos y las tapas. Muy originales son los anaqueles y botelleros. Pero lo que más llama la atención es, sin duda alguna, el mostrador de estaño; en un extremo del mismo hay una pila también de estaño, que estaba destinada en su momento a refrescar en la cubeta o lebrillo las típicas frascas de vino y para lavar los vasos. Sobre la pila hay un original grifo con forma de cabeza de perro. La pila tiene, además, una espléndida grifería de cinco caños. De los grifos manaba cerveza, vermú, agua con gas y agua del canal. Junto a este mostrador, hay otro de una valiosa piedra, el ónice, lo que hace de él un mostrador único en Madrid y, probablemente, en toda España.

Sus comedores tienen un friso de madera a media altura y un zócalo labrado en su parte superior, quedando el resto de paredes, decoradas con cuadros, fotos, relojes y ornamentos decorativos.

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  • abril 19, 2024 3:25 am local time

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Nuestra carta

Su cocina es típica madrileña, con un toque vanguardista que le da su chef Mario Pilar Quiroga. Se puede comer de tapas o a la carta, donde destacan tapas como el brownie de morcilla con queso de cabra, pimiento de piquillo relleno de rabo de toro, mollejitas de cordero lechal al ajillo, o los típicos callos, caracoles a la madrileña, etc.

 

La carta sorprende por su equilibrio entre las recetas centenarias y los platos con un toque vanguardista. Podemos destacar el ravioli relleno de manitas de cerdo y aceitunas negras, pulpo a la brasa con hummus de garbanzo y ajada de pimentón de la Vera, menestra de verdura con sopa de guisantes, pencas de acelgas a la madrileña y las inconfundibles croquetas caseras de jamón, entre otras.

 

Como platos principales, llama la atención entre los pescados, el bacalao a la brasa con pil-pil de morcilla y risotto de champiñón, lomo de merluza con salsa nantua y langostinos, o unos chipirones rellenos de setas. Los platos de carne más demandados son jarrete de cordero en salsa con cuscús de verduras, callos a la madrileña, rabo estofado, confit de pato con Pedro Ximénez y manzana caramelizada, carrillada de ternera con parmentier de romero y ajo o las manitas de cordero a la madrileña.

 

Y los más golosos no deben dejar de probar la torrija con salsa de canela, o arroz con leche a la madrileña, el flan casero y las tartas de la casa.

 

La bodega es muy completa con referencias de todas las Denominaciones de Origen.

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